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Con el auge de las cadenas de suministro digitalizadas en la era de la Industria 4.0, se están empezando a transformar las operaciones de almacenamiento y fabricación. Otros factores que están provocando cambios son: la demanda de los clientes, la introducción de la automatización, el intercambio de datos, la inteligencia artificial (IA) y la robótica. De hecho, el 81 % de los responsables de cadenas de suministro afirman que sus clientes piden más productos personalizados que hace tres años1.
Como consecuencia de ello, algunas empresas están teniendo problemas con los sistemas de gestión de almacenes (SGA). La pandemia de COVID-19 no ha hecho más que empeorar la situación, aumentando la escasez de trabajadores y acelerando la sustitución de las tiendas físicas por el comercio electrónico. Ahora es imprescindible que las organizaciones adopten nuevas tecnologías, inviertan en almacenes preparados para el futuro y optimicen su cadena de suministro digital. En los próximos cinco años, los directivos tienen previsto modernizar sus sistemas para aumentar la productividad, disponer de información en tiempo real y tomar decisiones basadas en datos2.
Operaciones en el almacén cada vez más complejas
Según un estudio realizado en los tres principales mercados europeos de e-commerce (Francia, Alemania y Reino Unido), desde el inicio de la pandemia de COVID-19 el porcentaje de consumidores que realizan más de la mitad de sus compras por Internet ha aumentado del 25 % al 80 %. Seis de cada diez consumidores, afirman que mantendrán los hábitos de compra por Internet una vez terminada la pandemia3.
En los almacenes, se tramitarán muchos más tipos de pedidos y modalidades de entrega diferentes (al día siguiente, en el mismo día, Click and Collect, etc.) y se exigirá una mayor visibilidad y trazabilidad, así como devoluciones más fáciles. Pero a la dificultad de tener que tramitar muchos más tipos de pedidos diferentes se le añade, el gran número de proveedores con los que trabajan las empresas y la necesidad de gestionar la recepción de las mercancías. Por ejemplo, un retailer puede tener varias tiendas que trabajen con un único almacén.
Aunque los trabajadores siguen siendo una pieza clave de la cadena de suministro, si se les proporcionan las tecnologías adecuadas, se puede lograr la máxima eficiencia y minimizar la tasa de errores.
Las estrategias de los almacenes están cambiando principalmente debido a estos seis factores clave:
- Uso actual de las tecnologías
- Contratación de personal
- Eficiencia o productividad del personal
- Aprovechamiento de la capacidad
- Calidad de los datos del sistema de gestión del almacén
- Organización del inventario
Superar las restricciones de los sistemas antiguos
Con la Industria 4.0 y a medida que se acelere la productividad, los sistemas antiguos que no se adapten a los avances tecnológicos provocarán problemas en los almacenes. Muchas empresas que están revisando sus operaciones se dan cuenta de que trabajan en almacenes, con sistemas y procesos heredados eficientes, pero poco flexibles. Esas infraestructuras se diseñaron para otro tipo de mercado y muchas han quedado obsoletas. Por lo tanto, es lógico que el 80 % de las empresas pretendan invertir en nuevas tecnologías para continuar manteniendo su competitividad4.
Sin embargo, sustituir los sistemas existentes suele ser un proceso largo y costoso. Las empresas con visión de futuro buscan mejorar la operativa incorporando tecnologías basadas en la nube, que aumentan la capacidad del personal y optimizan los sistemas y procesos de toda la cadena de suministro. Además, mejoran la visibilidad en tiempo real de los trabajadores, el inventario, los procesos y los activos, para lograr una ejecución basada en datos.
Solución: modernizar el almacén desde la entrada hasta la salida de las mercancías
Para adoptar esta nueva forma de trabajar y aportar más innovación al almacén, con una solución de ejecución de procesos de almacén se podrán crear las bases necesarias para optimizar las operaciones.
Las empresas con más probabilidades de destacar y tener éxito, serán las que utilicen la digitalización para lograr unas operaciones más flexibles, ágiles y rápidas. La tecnología en sí misma no suele ser ágil; son los procesos y los sistemas de las operaciones los que aportan la flexibilidad necesaria. La nube es esencial para adaptarse a los cambios y a la rápida fluctuación de las operaciones de la cadena de suministro, garantizando que el software pueda funcionar con la tecnología más reciente. Si se realizan las inversiones adecuadas desde el principio, se pueden incorporar nuevas tecnologías sin tener que renovar todo el SGA. En definitiva, se trata de invertir en sistemas escalables basados en la nube en lugar de escoger una solución que dependa de una única tecnología.
Dotar a los trabajadores de tecnología
Aunque la automatización es inherente a la Industria 4.0, el 77 % de los encuestados afirman que dotar a los trabajadores de la tecnología necesaria es la mejor forma de introducir la automatización en el almacén5. Algunas empresas ya están realizando importantes inversiones en soluciones de automatización fijas para manipular, empaquetar, clasificar y trasladar mercancías. Entre los dispositivos móviles más utilizados por los trabajadores de almacén destacan las tablets rugerizadas, las impresoras portátiles de códigos de barras y los dispositivos wearable. Entre las ventajas de la migración al sistema operativo Android destacan el aumento de la eficiencia de los trabajadores, una mayor adaptación a flujos de trabajo más complejos y una productividad estable que no se ve afectada por la variabilidad de la mano de obra.
Los procesos tienen prioridad sobre la tecnología
Modernizar la cadena de suministro y el almacén para lograr agilidad y eficiencia, es un proceso esencial a largo plazo para el que se necesita encontrar el justo equilibrio entre la optimización de los procesos y las nuevas tecnologías. Aunque implantar nuevas tecnologías puede ser complejo, se traduce en un aumento de la eficiencia, exactitud y visibilidad. Dotar a los trabajadores de tecnología inteligente y dispositivos de captura de datos en tiempo real es fundamental para tramitar los pedidos sin errores y de forma sostenible.
A la hora de considerar una inversión, antes de pensar en la tecnología, se deben tener en cuenta los procesos. De entrada, se debe encargar a un partner tecnológico especializado una revisión integral de los procesos, seguida de una recomendación óptima para solucionar los problemas de productividad.
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